Créditos: Archivo Estudios San Miguel Clásicos argentinos: marzo
Cine en el CCK suma una nueva propuesta de cine nacional, realizada con apoyo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales a través del Programa Museos de película: el ciclo Clásicos argentinos.
Repartidas en ocho funciones, este mes se proyectan cuatro películas: Dios se lo pague (Luis César Amadori, 1948), El ángel desnudo (Carlos Hugo Christensen, 1946), El hombre que debía una muerte (Mario Soffici, 1955) y El pecado de Julia (Mario Soffici, 1946).
Agenda de marzo
Viernes 1
18 h - Sala A: El ángel desnudo
20 h - Sala B: El pecado de Julia
Sábado 2
18 h - Sala A: El hombre que debía una muerte
20 h - Sala B: Dios se lo pague
Viernes 15
18 h - Sala A: El hombre que debía una muerte
20 h - Sala B: Dios se lo pague
Sábado 16
18 h - Sala A: El ángel desnudo
20 h - Sala B: El pecado de Julia
Las proyecciones no requieren reserva de entradas: el ingreso es por orden de llegada hasta agotar la capacidad de la sala. Una vez comenzada la función no se permitirá el ingreso a la sala.
Programación
El ángel desnudo
Carlos Hugo Christensen. Argentina, 1946. 85’. Drama. Para mayores de 13 años.
Un millonario caído en la bancarrota y acosado por las deudas de juego pide ayuda a un artista que conoció en su juventud. Este accede a la petición a cambio de que su bella hija pose desnuda para él.
El pecado de Julia
Mario Soffici. Argentina, 1946. 90’. Drama. Para mayores de 16 años.
El amor de una aristócrata por su criado la lleva al suicidio, cuando tras haber robado por él es abandonada.
El hombre que debía una muerte
Mario Soffici. Argentina, 1955. 80’. Drama, suspenso. Para mayores de 13 años.
Una joven recibe en su casa a un extraño que finge tener un accidente. Tras un romance fugaz, ambos se casan y ella hereda enseguida una fortuna debido a la muerte de su tío. Más tarde, la joven descubrirá que existe una conexión entre los hechos.
Dios se lo pague
Luis César Amadori. Argentina, 1948. 117’. Drama. Para mayores de 13 años.
Una mujer jugadora, Nancy, que ostenta su elegancia para disimular su pobreza mientras espera que un hombre adinerado aparezca y se ocupe de ella, conversa con el viejo que mendiga en la puerta de un casino. Poco después, un pretendiente rico y misterioso le ofrece una vida de lujos, aunque alejada de las convenciones sociales.