Hacia la integración cultural: Lula homenajeado en el Centro Cultural Kirchner

“Quiero decirle al pueblo argentino que Brasil está de vuelta”, dijo el presidente Luiz Inácio Lula da Silva el lunes en la noche en el auditorio principal del Centro Cultural Kirchner. Lo hizo al lado del presidente Alberto Fernández y del exmandatario de Bolivia Evo Morales, rodeado de los artistas que brindaron el Concierto de la Hermandad argentino-brasileña para recibir y homenajear a quien asumió la presidencia el pasado 1 de enero en Brasilia.

La velada contó con las voces e instrumentos de artistas como Nahuel Pennisi, que interpretó la canción “Sueño con serpientes” del cantautor cubano Silvio Rodríguez; Nacha Guevara, que cantó la adaptación musical del poema “Te quiero” del poeta uruguayo Mario Benedetti; Juan Carlos Baglietto, que interpretó “Preludio para el año 3001” de Astor Piazzolla y Horacio Ferrer, y Teresa Parodi, que hizo lo propio con la canción “Volver a los 17” de la cantautora chilena Violeta Parra. “El sur también existe y tenemos que defenderlo”, dijo el bandoneonista Rodolfo Mederos antes de interpretar el tango “Sur”.

La música también fue brasileña, con la voz de la cantante Teresa Cristina, vestida de naranja y acompañada de un pandeiro y una guitarra para cantar dos clásicos sambas cariocas: “Alvorada”, de Cartola, y “Foi um rio que passou em minha vida”, de Paulinho da Viola. Para el cierre, todos los artistas subieron al escenario a cantar “Solo le pido a Dios” de León Gieco, quien minutos antes había interpretado “La memoria” con, otra vez, todo el auditorio de pie para celebrar la música, el regreso tan esperado de Lula da Silva a Argentina y los nuevos pasos de integración latinoamericana.

“Es una gran alegría estar con dos amigos a los que quiero entrañablemente, amigos que no la pasaron bien y que gracias a dios hoy están disfrutando con nosotros de esta jornada maravillosa”, dijo Fernández al tomar la palabra luego del concierto.

“Después de un espectáculo como este no puede haber discurso, apenas un agradecimiento a los artistas, y agradecimiento al pueblo argentino por la solidaridad en los momentos difíciles que vivimos en Brasil, que Evo vivió en Bolivia”, afirmó luego Lula, entre los aplausos y las ovaciones tanto para él como para Evo Morales, ambos siempre recibidos a sala llena en sus visitas en Argentina.

La integración también es cultural

“Es la mejor forma de recibir a Lula, es un gran homenaje”, dijo al terminar el concierto Paulo Pereira, coordinador del Partido de los Trabajadores (PT) en Argentina. Pereira señaló una presencia central en la velada: la de Rosangela “Janja” da Silva, esposa del mandatario, quien tuvo un rol central en la campaña y la toma de posesión de Lula, en particular en materia cultural.

El Kirchner fue así testigo de uno de los eventos centrales que marcaron el regreso a la integración entre ambos países, un proceso interrumpido durante los últimos años por el aislamiento internacional provocado por el expresidente Jair Bolsonaro, como explicó Lula. Con la vuelta del líder del PT al Palacio presidencial de Planalto se abrió nuevamente el camino de integración entre ambos países, así como la defensa de la democracia como bandera central.

“Es un hecho concreto que muchos países de América Latina todavía no aprendieron a convivir democráticamente, y necesitamos consolidar la democracia, porque solo en un régimen democrático un indígena puede ser presidente de un país, solo en un régimen democrático un obrero mecánico puede ser presidente”, afirmó Lula, quien debió hacer frente a un intento de golpe de Estado el 8 de enero, a una semana de haber asumido el mandato.

El presidente brasileño puso énfasis en la necesidad de avanzar en consolidar la integración regional con el Mercosur, la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), cuya cumbre empieza este martes 24 de enero, organismo al cual Brasil volvió a unirse luego de haberse desvinculado con el anterior presidente.

“Que nuestra relación no sea apenas comercial, que nuestras diferencias solo queden en el campo del fútbol, que la gente construya una alianza fuerte, en lo comercial, en el campo cultural, en lo político y en lo social, que nuestras universidades se hermanen para que la gente pueda hacer una revolución educacional en nuestro continente”, señaló Lula al terminar el acto, luego de una jornada de reuniones con autoridades públicas, organismos de derechos humanos, en el inicio del gran regreso de Brasil.