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Concluyó Maitena. Las mujeres de mi vida

Artes Visuales, Noticias

El domingo 21 de mayo terminó una muestra visitada por miles de personas durante ocho meses en las salas del cuarto piso, que se colmaron de risas, preguntas, reflexiones y actividades: Maitena. Las mujeres de mi vida. Por Rita Zampardi


La primera muestra retrospectiva del ícono del humor y la cultura argentina invitó a toda la comunidad a sumergirse en su universo, su historia y sus personajes. Curada por Liliana Viola y con diseño de montaje de Alejandro Ros, Maitena. Las mujeres de mi vida se desplegó en ocho salas del Centro Cultural Kirchner, retratando más de tres décadas de trabajo. En el recorrido, se presentaron bocetos y piezas de grandes éxitos de la artista, como Mujeres alteradas, Superadas y Curvas peligrosas, y dibujos eróticos de sus primeras publicaciones –entre 1986 y 1990– en las revistas Sex humor, Cerdos & Peces y Fierro.

Por otro lado, se invitó al público a conocer de cerca cómo es el proceso creativo de Maitena, con los elementos y pasos preparatorios que hacen a las piezas definitivas de las tiras, a través de una sala dedicada exclusivamente a retratar este camino. De esta manera, la exposición reveló también un material de Maitena secreto e íntimo: primeros trazos, piezas originales, bocetos y hasta intervenciones en luchas por diferentes causas y derechos. Las cientos de mujeres de sus historietas habitaron las paredes del Kirchner en distintos formatos y tamaños, retratando conversaciones, preguntas, y reflexiones que atraviesan directamente las problemáticas de nuestro presente. Así, el cuarto piso se convirtió en un espacio que recibió a miles de visitantes jóvenes, adultxs, y adolescentes de distintos lugares del país, que compartieron juntxs momentos de lectura y risas.

El título elegido, “Las mujeres de mi vida”, celebra la poligamia –¿o el poliamor?– de una artista que, en lugar de elegir a un solo personaje para sus historietas, decidió que el personaje fuera el tema. Una multiplicidad de mujeres personificó temáticas que abarcan desde la infidelidad, el cuerpo y lxs hijxs hasta las tensiones laborales. Más de una vez, Maitena declaró que “las mujeres no somos todas iguales, pero nos pasan las mismas cosas” para explicar la profunda conexión que estableció a lo largo de toda su carrera con el público. A través de una alusión fuertemente feminista, y al mismo tiempo irónica y humorística, se constituyó como una socióloga de la vida cotidiana y una referente ineludible de la historieta latinoamericana.

Para este gran proyecto, la artista invitó a participar a Línea Peluda, un grupo de dibujantes transfeministas que visibilizan el activismo artístico con una respuesta política. En una conversación con las integrantes del colectivo, explicaron: “Tenemos en claro que el arte es una herramienta para la lucha y la transformación tanto personal como colectiva, social y política. A través del arte comunicamos, nos expresamos, sacamos broncas, festejamos, luchamos. Cada dibujo tiene algo personal que nos atraviesa y que decidimos compartirlo”.

Programa público

Con el objetivo de invitar al público a participar e intervenir en la exposición, se presentó el Programa Público de la muestra, una serie de actividades de febrero a mayo que incluyeron recorridos guiados, talleres de ilustración y conversatorios.
En febrero, invitamos a la ilustradora Powerpaola a dictar un taller de dibujo junto con Maitena. Autoficción gráfica y otras maneras de reírse de unx mismx invitó a lxs participantes a poner la mirada en el interior del universo personal de cada unx para realizar un autorretrato a través de la creación de puentes entre la subjetividad y la relación con lx otrx.

En marzo, Dibujemos juntas fue una activación en la que la propia Maitena incentivó al público a intervenir las paredes vidriadas de la sala 404. Con marcadores en mano y una gran cuota de imaginación y creatividad, tanto aficionadxs del dibujo como principiantes fueron protagonistas de una propuesta que dio origen a un espacio de intervención y manifestación. En una búsqueda por activar el diálogo entre la obra y nuestra comunidad, la anécdota fue una parte constitutiva del proceso de trabajo e intercambio entre la artista y lxs visitantes, que se apropiaron del espacio sumando sus producciones a esta gran pared. Niñxs, jóvenes y adultxs pasaron a dejar su huella, que fue incorporada como producción efímera de la exhibición.

Por su parte, en ocasión del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, el taller Dibujar memoria y luchas a cargo de Línea Peluda tuvo como objetivo ampliar el mural de la muestra a través de la intervención de pañuelos de papel y pegatinas. En este encuentro hubo oportunidad de reflexionar acerca de los derechos de las mujeres y personas del colectivx  lgbtqnb+ en el contexto de emergencia climática, para reunir voces diversas y expandir demandas históricas y coyunturales.

En abril, Maitena conversó junto a la psicoanalista Gabriela Grinbaum en De qué sufren las mujeres hoy?, una actividad que buscó ahondar en los dolores y padecimientos de las mujeres en la época contemporánea. La Sala Federal se colmó de estudiantes de psicología, jóvenes y adultxs que participaron de un encuentro lleno de nuevas preguntas, que contribuyó a una construcción colectiva de conocimiento alrededor de la temática. Con un tinte feminista e irónico, la humorista retomó las historias detrás de sus mujeres y las puso en diálogo con las declaraciones de la psicóloga. A la pregunta “¿de qué sufren las mujeres hoy?”, Maitena aseguró que, más allá de los cambios y avances a nivel discursivo en lo que respecta a los derechos de las mujeres, sufren de lo mismo que padecían hace veinte o treinta años. El eje central de este sufrimiento, plantearon ambas, es la cantidad de frentes de combate abiertos que tienen al mismo tiempo: el trabajo, lxs hijxs, la pareja, el cuerpo, entre otros. Es decir, la problemática central es que el universo del cuidado está, todavía, exclusivamente asignado a las mujeres.

 

En el último mes de la muestra se llevaron a cabo dos actividades distintas. En primer término, tuvo lugar La ESI antes de la ESI, un conversatorio entre la socióloga Eleonor Faur y Maitena. El encuentro se centró en uno de los debates centrales del feminismo actual: la ética del cuidado y la solidaridad humana. A través de un acercamiento a las viñetas de Maitena, se indagó acerca de conceptos nodales de la Educación Sexual Integral como cuidados, maternidades, cuerpos, familias y micromachismos. La actividad, dirigida a docentes y a público general, comenzó su recorrido en la sala Alteradas para repensar el significado alterar el punto de vista para dar lugar a una nueva perspectiva, que entendemos podría ser una de las definiciones de la ESI.

Finalmente, y como cierre de Maitena. Las mujeres de mi vida, se invitó al público a participar de una visita guiada con Maitena, la curadora de la exposición Liliana Viola y el diseñador de montaje Alejandro Ros. La actividad convocó a cientos de personas que recorrieron juntxs las ocho salas que conforman la exposición. En cada una, la artista relató el proceso creativo detrás de cada pieza y detalló cómo fue su trabajo y relación con su equipo. Entre risas y anécdotas, el cuarto piso se desbordó de visitantes que vinieron a recorrer por última vez la exposición.

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